Es tan popular que ya no alcanza el año para los torneos federados más famosos y cotizados, no ha terminado una copa cuando ya comienza la otra, a veces se juegan simultáneamente. La idea para confeccionar el uniforme era dar una imagen representativa del país frente a todo el mundo. Llegaba el Mundial de Francia 98 y México, que contaba con un buen equipo entre los que destacaban jugadores como Jorge Campos o Cuauhtémoc Blanco, optaba a dejar una buena imagen.