Para este ‘debut’, la Princesa eligió un vestido naranja de una firma que hace poco vistió su madre, la reina Letizia. Se trataba de aros múltiples, uno en dorado y otro formado con piedras blancas, de la firma Pertegaz pero fabricados por el taller catalán Karambake, situado en Badalona. Tal y como se puede ver en el vídeo que ha compartido en su cuenta de Twitter, todos los detalles de la camiseta son un desastre.